Confiemos siempre en el punto de vista de Dios para la dirección de nuestra vida. Al hacer esto, tendremos un claro entendimiento de lo que se necesita para vivir enteramente. Tenemos al Espíritu Santo de Dios en nosotros para llevar esta vida basada en los estándares del Reino. Sin embargo, si no caminamos cada día en todo lo que Dios desea para nosotros, nunca vamos a maximizar el potencial en nuestro interior. En lugar de operar a todo poder, estaremos experimentando un déficit en la vida. La sanidad de nuestro futuro depende de la claridad de nuestro entendimiento, de lo que hay en nuestro interior para nutrir, crecer y usarlo en nuestra vida. Al sólo alimentar nuestro cuerpo, estaremos viviendo con nuestro espíritu y alma desnutridos. Tu amigo,
Randy Morrison
www.randymorrison.org
|
 La paz que el mundo provee, es entendida como un tiempo sin conflicto, una temporada de calma o un periodo sin ley. Cada uno de estos conceptos son susceptibles y vulnerables a ser atacados por fuerzas externas. Al referirnos a la paz de Dios, no nos referimos a una situación temporal o un periodo de tiempo. La paz de Dios es un estado constante de nuestra mente y alma. Permanece a través de toda situación y circunstancia. Una vez que la paz de Dios permanezca en tu mente y corazón, estamos eternamente protegidos contra las fuerzas hostiles.
Recuerda: Mucho del vacío y debilidad que a veces experimentamos encuentra raíz en nuestra falta de capacidad de caminar en "el todo" que Dios desea que vivamos. Al tener la Paz de Dios, no tenemos porqué temerle al presente o al futuro.
Lee, reflexiona y actúa de acuerdo a:
|
2. Plenitud

Cuando algo es pleno, está completo, no dividido ni roto, sino una sola pieza. Dios diseñó un plan para que nuestra vida fuera construida de forma plena. Nuestra responsabilidad es entender el significado de pleno. El conocer los elementos que nos constituyen humanamente es el paso número uno. Somos un espíritu, poseemos una alma y habitamos en un cuerpo. Cada una de estas tres partes deben operar juntas de forma perfecta para poder experimentar plenitud en la vida.
Recuerda: No podemos esperar vivir una vida "plena" si nuestra vida espiritual opera separada de todo lo demás. Para vivir una vida plena, debemos entender primero como es que el hombre está constituido.
Lee, reflexiona y actúa de acuerdo a:
|
3.La parte más alta

Nuestro espíritu nos conecta don Dios. Es la parte más alta de nuestra estructura. Nuestro espíritu es también la parte donde residen los pensamientos y sentimientos más profundos. Aquí es dónde nace la capacidad de desarrollar una relación íntima con Dios. Al recibir a Cristo, nuestro espíritu se renueva en nuestro interior. Nuestra responsabilidad es asegurarnos que nuestro espíritu permanezca nutrido a través de la pureza de nuestra alma y cuerpo.
Recuerda: La claridad del entendimiento acerca de los 3 componentes del hombre es el primer paso para verdaderamente aprender acerca de nuestra relación con Dios. Nuestro espíritu es la parte de nuestro ser que conoce quienes somos en verdad.
Lee, reflexiona y actúa de acuerdo a: Juan 14:27
|